El muelle de suspensión es una pieza metálica en forma de espiral que forma parte del sistema de suspensión del coche.
Su función es absorber los baches e irregularidades del terreno, manteniendo el confort y la estabilidad durante la conducción.
Si un muelle de suspensión se rompe o pierde fuerza, el coche puede inclinarse, hacer ruidos y perder adherencia al circular.
